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Información de Salud Para Padres
Los recién nacidos a menudo tienen espinillas o enrojecimientos temporales que desaparecen a medida que el niño se adapta a la vida fuera del útero. También es bastante frecuente que, al nacer o poco tiempo después, aparezcan manchas de nacimiento en la piel. Existen distintos tipos de manchas de nacimiento, que abarcan desde las que son apenas perceptibles hasta las que causan desfiguración. Sin embargo, independientemente de su tamaño, pueden representar una molestia
Las manchas de nacimiento pueden ser planas o protuberantes, tener bordes regulares o irregulares y distintos tonos: desde el marrón, tostado, negro o azul pálido a rosado, rojo o púrpura. Los dos tipos principales de manchas de nacimiento son las manchas de nacimiento vasculares rojas (por ejemplo, los hemangiomas en fresa, las manchas tipo “vino de Oporto” y “mordeduras de cigüeña) y las manchas de nacimiento pigmentadas (como los lunares, las manchas color café con leche y la mancha Mongólica).
Mayormente son inofensivas y, en algunos casos, desaparecen por sí solas o se encogen con el tiempo. Sin embargo, dado que algunas manchas de nacimiento se asocian con otros problemas de salud, hable con su médico para saber si éste es el caso de su hijo.
Las manchas de nacimiento no se pueden prevenir y no se producen por algo que se haga o no se haga durante el embarazo. Es mera superstición que las “manchas” se producen por algo que la madre hizo o comió. El origen de la mayoría de las manchas de nacimiento se desconoce. Aunque pueden ser hereditarias, esto no sucede a menudo y, generalmente, no tienen ninguna relación con los traumatismos de la piel durante el parto.
Los dos tipos principales de manchas de nacimiento se diferencian por sus causas. Las manchas de nacimiento vasculares (vasos sanguíneos) se producen cuando los vasos sanguíneos no se forman correctamente, o bien hay demasiados o son más anchos de lo normal. Las manchas de nacimiento pigmentadas se originan por el crecimiento excesivo de las células que producen los pigmentos de la piel.
Las manchas de nacimiento vasculares más comunes son las máculas, los hemangiomas y las manchas tipo “vino de Oporto”:
Máculas. Estas tenues manchas rojas, que también se denominan placas salmón, besos de ángel o mordeduras de cigüeña, son el tipo más común de manchas de nacimiento vasculares. A menudo se observan en la frente o los párpados, la parte posterior del cuello o en la nariz, el labio superior o la parte posterior de la cabeza. Pueden ser más evidentes cuando el bebé llora. Generalmente desaparecen por sí solas cuando el niño alcanza el año o los 2 años de edad, aunque algunas pueden durar hasta la adultez.
Hemangiomas. Los hemangiomas se clasifican en superficiales, cuando aparecen en la superficie de la piel (manchas de color de las fresas), y profundos, cuando se encuentran en un nivel más profundo de la piel. Pueden ser levemente protuberantes y de color rojo brillante y a veces no se ven hasta algunos días o semanas después del nacimiento. Los hemangiomas profundos pueden ser de color azulado, ya que afectan a los vasos sanguíneos que se encuentran en las capas más profundas de la piel.
Los hemangiomas crecen con gran rapidez aproximadamente durante los primeros 6 meses de vida, pero en general, se encogen y desaparecen entre los 5 y 9 años del niño. Algunos, en especial los más grandes, pueden dejar una cicatriz a medida que entran en regresión. Esta cicatriz puede corregirse con cirugía plástica menor. La mayoría se encuentra en la cabeza o el cuello, aunque pueden aparecer en cualquier lugar del cuerpo y causar complicaciones si su ubicación interfiere con la vista, alimentación, respiración u otras funciones del cuerpo.
Mancha tipo “vino de Oporto”. Se trata de decoloraciones semejantes a una mancha de vino en algún sector del cuerpo, más frecuentemente en el rostro, el cuello, los brazos o las piernas. Las manchas “vino de Oporto” pueden ser de cualquier tamaño, pero sólo crecen a medida que crece el niño. Tienden a oscurecerse con el tiempo y pueden engrosarse y asemejarse a pequeñas piedras a mediados de la edad adulta a menos que reciban tratamiento. Nunca desaparecen por sí solas. Los que se encuentran cerca del ojo deben evaluarse para ver si representan una posible complicación con los ojos.
Las manchas de nacimiento pigmentadas más comunes son las manchas color café con leche, las manchas mongólicas y los lunares:
Manchas color café con leche. Estas manchas son muy comunes y de color café con leche, de ahí su nombre. Pueden encontrarse en cualquier parte del cuerpo y a veces se multiplican a medida que el niño crece. Una sola no representa un problema. Sin embargo, es conveniente realizar una evaluación a su hijo si tiene varias manchas más grandes que 0.5 cm (en el caso de un niño pequeño) o más grandes que 1.5 cm (en el caso de un niño mayor), ya que esto puede ser un síntoma de neurofibromatosis (trastorno genético que produce el crecimiento anormal de las células de los tejidos nerviosos).
Manchas mongólicas. Estas placas de color gris azulado a menudo se encuentran en la zona lumbar o en los glúteos. Son más comunes en pieles oscuras, como las de los niños de ascendencia asiática, nativo estadounidense, africana, hispana y del sur de Europa. En general, desaparecen sin tratamiento (a menudo completamente) cuando el niño alcanza la edad escolar.
Lunares (nevos congénitos, nevos pilosos). “Lunar” es un término general para referirse a los nevos marrones. La mayoría de las personas tienen lunares en algún momento de sus vidas. Los que se observan al nacer se llaman nevos congénitos y duran toda la vida. Los nevos congénitos grandes o gigantes tienen mayor probabilidad de convertirse en cáncer de piel (melanoma) en el futuro, aunque el riesgo es muy bajo en ambos. El riesgo de los nevos congénitos puede ser mayor. Los lunares pueden ser de color tostado, marrón o negro; planos o protuberantes; y pueden contener pelo.
El médico debe evaluar una mancha de nacimiento tan pronto como aparece para determinar su tipo y, si es necesario, el control y el tratamiento necesario. Llame al médico si una mancha de nacimiento sangra, duele, pica o se infecta. Al igual que con cualquier lesión que sangra, debe limpiar la herida con agua y jabón y, con un vendaje de gasa, hacer presión en el área afectada hasta que se detenga el sangrado. Si el sangrado no se detiene, llame al médico.
A menudo, junto con los hemangiomas, se forman úlceras abiertas que se pueden infectar. Las manchas de nacimiento pigmentadas rara vez ocasionan otros problemas. Sin embargo, los lunares se deben controlar durante toda la vida en caso de que cambien de tamaño, color o textura, lo cual puede ser normal o puede ser un signo de cáncer de piel.
En general, las manchas de nacimiento pigmentadas no se tratan, excepto los lunares congénitos y, en algunas ocasiones, las manchas color café con leche. Los lunares (en especial los nevos congénitos grandes o gigantes) a veces se extirpan mediante cirugía, aunque los de mayor tamaño pueden ser más difíciles de extraer. Las manchas color café con leche se pueden quitar con láser (energía lumínica de alta concentración), pero a menudo reaparecen.
Por otro lado, las manchas de nacimiento vasculares se pueden tratar. La excepción son las máculas, que generalmente desaparecen por sí solas. Las que se encuentran en la parte posterior del cuello pueden ser más persistentes, aunque no son muy evidentes.
Las manchas tipo “vino de Oporto” y determinados hemangiomas pueden producir desfiguraciones y causar vergüenza a los niños. En general, los hemangiomas no necesitan tratamiento, ya que se encogen hasta desaparecer cuando el niño llega a los 9 años de edad. Los hemangiomas más grandes o graves a menudo se tratan con medicamentos.
El láser es el tratamiento más común para las manchas de “vino de Oporto”. La mayoría se atenúan significativamente después de varios tratamientos con láser “pulsado de colorante”, aunque algunos reaparecen y se los debe tratar nuevamente. El tratamiento láser a menudo se inicia en la infancia, cuando la mancha y los vasos sanguíneos son más pequeños. Las manchas que se encuentran en la cabeza y el cuello son las que mejor responden al tratamiento láser. Las mancha de “vino de Oporto” también se pueden camuflar con maquillaje opaco especial.
Puede que al principio se impresione al ver una mancha de nacimiento en su recién nacido. Aunque nadie es perfecto, muchas personas tienen la imagen del bebé ideal. Si la mancha de nacimiento es muy evidente, es posible que las personas hagan preguntas o miren fijamente, lo cual puede parecer grosero. Es útil contar con una explicación sencilla para sortear intromisiones de este tipo. La mayoría de las personas no lo hacen con mala intención, pero, si se exceden, no está mal hacérselos saber.
Incluso desde muy pequeños, los niños observan cómo los padres reaccionan ante situaciones de este tipo. De esta manera, aprenden a confrontar las reacciones de las demás personas. Si se habla de forma abierta y sencilla sobre una mancha de nacimiento con los niños, es más probable que la acepten como otra parte de sí mismos, al igual que el color del cabello. Y practique respuestas sencillas que puedan utilizar cuando les hagan alguna pregunta: “Es sólo una mancha de nacimiento. La tengo desde que nací”. Estar rodeados de familiares y amigos que los traten con normalidad también es importante para la salud emocional de los niños.
El eccema es una afección en que la piel se irrita y se vuelve roja, seca, con bultos y picazón. Hay varios tipos de eccema, pero el más frecuente de todos es la dermatitis atópica.
Las marcas de nacimiento deben su nombre al simple motivo de que ¡están presentes en la piel de muchos bebés recién nacidos! A un bebé le pueden salir marcas de nacimiento antes de nacer o al poco tiempo del nacimiento.
El momento en que usted podrá ver, tocar o inspeccionar por primera vez a su recién nacido dependerá del tipo de parto que tenga, de su estado y del estado del bebé. Si tiene un parto vaginal sin complicaciones, deberÃan permitirle coger al bebé a los pocos minutos de dar a luz.
La piel es nuestro órgano más grande. Si la piel de un varón adulto tÃpico de 150 libras (68 kilogramos) fuera estirada, cubrirÃa unas 2 yardas cuadradas (1,7 metros cuadrados) y pesarÃa unas 9 libras (4 kilogramos). La piel protege la red de músculos, huesos, nervios, vasos sanguÃneos y todo lo que hay dentro de nuestro cuerpo. Nuestros párpados tienen la piel más fina y las plantas de los pies, la más gruesa.
Una mancha de vino Oporto es un tipo de mancha de nacimiento que recibe este nombre porque parece una salpicadura de vino tinto sobre la piel.